Procurar salud mental y brindar apoyo tanto familiar como de amigos, fundamental para sobrellevar enfermedades crónicas
Procurar salud mental y brindar apoyo tanto familiar como de amigos, fundamental para sobrellevar enfermedades crónicas
- El Día Mundial de la Salud Mental se conmemora el 10 de octubre
- Se debe aceptar la enfermedad y cambios porque familiares se convierten en cuidadores
- El temor a la pérdida de la autonomía genera frustración y desánimo
CDMX octubre de 2023.- Cuando un paciente se enfrenta a una enfermedad que pone en riesgo su vida (o calidad de vida) puede tener diversos retos emocionales por la naturaleza crónica de la enfermedad y sus implicaciones, más aún cuando no se cuenta con el respaldo de la familia o los amigos cercanos, considerados como una “red de apoyo”.
Así lo alertó la psicóloga Martha Cecilia Hernández, quien detalló que “cuando surge la negación de la enfermedad se corre el riesgo de que se vuelva tema tabú no sólo en el paciente, sino también en la familia, ante lo cual es necesario incluirla en el discurso cotidiano para vivir la enfermedad de una forma más amigable”.
En el marco del Día Mundial de la Salud Mental que se conmemora en el mes de octubre, Hernández García detalló que específicamente en el caso de los pacientes con Enfermedad Renal Crónica (ERC), pueden enfrentar depresión y ansiedad, toda vez que deben someterse a tratamientos como diálisis o hemodiálisis que evidentemente impactan el estado anímico por los cambios inherentes al estilo de vida.
La responsable del área de Psicología en Médica Santa Carmen, agregó que también se pueden presentar la pérdida de la autonomía con disminución en la calidad de vida, sentimientos de culpa, vergüenza y el miedo a la muerte, entre otros, dijo la experta con diplomados tanto en Tanatología como en Tratamiento y Rehabilitación de Adicciones.
El apoyo de familia y amigos es clave tanto para el paciente como para la familia, quienes deben contar con la guía y orientación de un equipo clínico. “La familia es fundamental porque debe aceptar la enfermedad y los cambios asociados, toda vez que los familiares se convierten en cuidadores o acompañantes del paciente –a quien se le debe brindar apoyo emocional tanto con palabras de aliento o escuchando sus preocupaciones para ayudarles a manejar el estrés (emocional)–, además del cuidado físico y la promoción de un estilo de vida saludable y claro, la adherencia al tratamiento”, indicó.
La especialista egresada de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) apuntó que la red de apoyo, integrada por el paciente, la familia y el equipo clínico, brindará el soporte emocional estratégico para hacer sentir más seguro de sí mismo al paciente y ayudarlo a aceptar la nueva realidad y entender mejor el padecimiento.
“Es esencial que los pacientes renales reciban apoyo emocional, ya sea por medio de terapia, de la familia y/o amigos o grupos, pues la atención integral que aborda tanto los aspectos físicos como emocionales de la enfermedad puede ayudar a los pacientes a enfrentar y superar esos retos”, concluyó.